Pretensión de la obra
Esta página pretende ser un camino que nos conduzca al edén perdido (no nos tranzaremos por menos). “Caminante no hay camino, se hace camino al andar”, a esta hechura, Ud. estimad@ amig@, está invitado a contribuir con sus conocimientos, sugerencias, críticas y comentarios, a fin de encontrar los fundamentos de salvación nacional y hacerlos parte de nuestra carta magna. Sabemos que esta es una misión ardua pero no imposible para un grupo participativo y deliberante.
Así como el futuro de toda especie biológica está contenido en su DNA, (hasta la segunda generación); el futuro de todo país está contenido en sus programas de desarrollo. Realizar programas que trasciendan las generaciones futuras, constituye el afán de las naciones desarrolladas. Por esto, las naciones más potentes han puesto los fundamentos de su desarrollo en proyectos destinados a proteger la niñez, el agro, el medio ambiente, y a transmitir e incrementar el conocimiento. El desarrollo cabal de estos programas, garantiza la obtención de un pueblo virtuoso, digno, trabajador, en suma, un pueblo pacífico y próspero. En nuestro país, estos proyectos son incipientes y sus resultados son exiguos. Por esta razón, estamos propensos a perder nuestra potestad de país libre y soberano.
Que mis amigos, colegas y lectores me perdonen el atrevimiento de hacer esta propuesta sin tener la respectiva autoridad legal o formal, pero he trabajado durante 50 años sobre este tema, los primeros 20 años capacitándome, los 20 años siguiente escribiéndolo, y los últimos 10 años publicitándolo, para meter el hombro, allá, donde la carga se está cayendo.